Los países menos desarrollados tienen grandes deudas
externas financieras, eso lo sabemos todos, pero muchas personas no son
conscientes de que los países tivos tienen una gran deuda ecológica.
Este tipo de deuda se genera con un mal uso de los recursos
naturales, derrochando estos recursos y produciendo graves daños ambientales al
planeta, ocupando masivamente y contaminando el suelo, destruyendo la flora y
fauna silvestres, produciendo ingentes cantidades de gases, residuos y aguas
contaminadas que son liberados al medio natural (atmósfera, ecosistemas
terrestres, ríos, mares y océanos, …), destruyéndolo, degradándolo o
contaminándolo de forma irreversible en muchas ocasiones. En definitiva, si se
contamina más de lo que el medio ambiente puede absorber se crea deuda
ecológica.
Es necesario modificar nuestro estilo de vida consumista,
nuestros procesos productivos de bienes y energía, nuestra responsabilidad
hacía los países menos desarrollados, … ¿nos fijamos en qué dicen nuestros
gobernantes en sus programas electorales, a la hora de elegirlos, sobre estas
cuestiones tan esenciales para nuestra vida, la de nuestros descendientes y la
de todos los seres humanos?. ¿exigimos que cumplan lo que han prometido?,
¿podemos hacer algo más en nuestras vidas cotidianas a favor del medio ambiente
y solidaridad con los más necesitados, ¿Estamos dispuestos a hacerlo?, … ¿sí, …
seguro?, ¿por qué no?, ..